A procrear se ha dicho

Soplan malos vientos para todos aquellos que tengan una hipoteca, hoy el BCE ha decidido subir los tipos de interés y situarlos en un 3.25, y parece que no va a ser la última subida este año. Así que prepárense, yo sólo les aviso. Y encima lo que llega desde USA no es muy esperanzador, parece que allí la burbuja especulativa se está pinchando.
Sí a eso le añadimos lo que cuesta un hijo, pues la ruina para una familia, según un informe de la CEACCU, criar a un hijo hasta los 18 años cuesta entre los 98000 € y 310000 €, dependiendo de ciertas variables tales como sí la enseñanza es pública o privada. Yo evidentemente los llevo a la pública, que no me puedo costear la privada. Tener hijos se va a convertir pronto en un lujo, o ya lo es? Llevan nuestros políticos haciendo mucho hincapié en que nuestro índice de natalidad es muy bajo, imagínense sí fuera más alto, con las pocas plazas de guarderías existentes y con nuestros niños metidos en barracones, que pasaría entonces. Que se preocupen menos de alentarnos a la procreación masiva y se dediquen a hacer políticas para la protección de la familia y la conciliación de la vida laboral y familiar.
Me ha hecho gracia Arturito +, que va a premiar el nacimiento del tercer hijo con un cheque de 4000 € durante los primeros seis años sí gana las elecciones. Carajo, quien se puede permitir hoy en día tener tres vástagos? Miro a mi círculo de amigos y familiares y sólo veo hijos únicos o parejitas, alzo un poco la vista, y que veo, a mis conocidos de familia bien, sí estos tienen tres o más, pero a estos no les hace falta el cheque regalo de 4000 €.
4000 € * 6 años= 24000 €. Sí me disculpan me voy a la cama a fornicar, a ver sí cae el tercero.

PD Sí ven moverse los círculos, mal rollo, es que follan poco, porque son fijos.

A don Ramón le va la televisión


Antes de las elecciones al Madrid comenté, que el por aquel entonces precandidato Ramón Calderón se desenvolvía bien ante las cámaras, con su apariencia de playboy cincuentañero, perfectamente trajeado, sabía manejar bien los tempos y supo vender su producto (eso sí con alguna promesa incumplida por medio), mientras sus rivales, poco agraciados ante el glamour de los focos de la televisión, solían espaciar o esquivar sus intervenciones televisivas.
Y en éstas, que don Ramón ganó las elecciones apoyado en sus promesas y en su soltura televisiva. Hay que felicitar a su departamento de marketing por la excelente campaña. Fue una campaña a la americana.
Una vez instalado en su anhelado sillón presidencial, y habiendo repartido las funciones entre sus colaboradores, pensaba yo, iluso de mi, que sus apariciones televisivas irían acorde al cargo que ocupa, presidente del Real Madrid. Pero no, tiene Ramón Calderón una exagerada obsesión a aparecer día sí y día también en los medios de comunicación, rodeado de contertulios de escaso nivel.
Empieza a cansar su excesiva presencia mediática para no decir nada, siempre remitiendo la parcela deportiva a Mijatovic y Capello. Y encima cuando habla con teórico conocimiento de causa, mete la pata (BBC Beckham).
Guárdese don Ramón de ser tan asiduo de los medios de comunicación, que tiempo tendrá no se preocupe, y recuerde es dueño de sus silencios y esclavo de sus palabras.